Esperando a una desconocida [Privado con Bell]

Con los ojos entrecerrados, comenzando a quedarse dormida, se toma un momento para pensar en una respuesta para el joven, sin ideas de que desayunar.

- Para comer haz lo que gustes, pero quiero te de frutillas...

Murmura suavemente, quizás sonando un poco caprichosa, haciendo ver que comenzaba a quedarse dormida poco a poco y por eso no controlaba correctamente sus palabras

Comenze a acariciar su cabello para que la joven comenzara a sentir sueño.
Cuando por fin Bell se durmio, Volvi a recostarla sobre la almohada para que pudiera descanzar mejor.
La joven era demaziado hermoza, aun mas cuando dormia de manera tan tierna.
Me levante de la cama, para irme a dormir al sofa. Pero antes, tenia que buscar lo que me habia pedido bell.

-Ahhh..tendre té de frutillas?- me pregunte a mi mismo en voz baja para no despertar a bell.

Comenze a buscar por todos los armario de la casa...revisando cuidadosamente cada lugar de la misma.
Busque por horas en todos los lugares, sin excito. Hasta que, cuando recien encontre el codiciado té de bell ya era cerca de las 8 de la mañana.

-Mierda....ahora no podre dormir....pero por lo menos consegui el té de frutillas- me rei un poco despues de esto, pero no demaziado fuerte...por que no queria que ella se despertara

El joven se quedo completamente estatico al escuchar las palabras de la joven.
Estaba muy asustado, ya que esta lo habia sorprendido.

-Locaaaaaaaa!!!-grito por el susto que la ojiroja le habia dado.

-Perdon perdon Bell..no fue mi intencion- se disculpo rapidamente por lo que habia dicho.

Cuando la ojiroja dijo que el rubio no habia dormido, el ya sabia lo que tenia que responder.

-No....si dormi Bell....es que siempre soy asi cuando recien me despierto-le mintio a la joven.

Sabia que esta lo regañaria por haberse quedado buscando el tè que le habia pedido.

-Por que piensas que no dormi?- pregunto arqueando la ceja derecha mientras encendia un cigarrillo.

Ante la primera reacción la pelinegra estalló en risas imposibles de contener, tumbándose en el suelo para seguir riendo de igual forma, hasta detenerse ante la excusa del joven, sonriendo confiadamente como si lo que fuese a decir dejase al muchacho sin palabras.
Dando unos pasos silenciosos sobre el suelo, ahora descalza por haberse levantado, se acercó lo suficiente al joven como para hacer inminente el contacto visual.

- Se te ve en los ojos

Señaló con voz tranquila y el puntas de pie para alcanzar las orbes azules del rubio mago, manteniendo sus orbes rojizos clavados allí. Aunque el joven aparentase estar bien esas pequeñas cosas no podía esconder.

- Tienes la vista cansada... muy cansada

Al escuchar las palabras de la joven, el ojiazul comenzo a acercarce dando pequeños pasos.
Como sabia que ya no podria evitar que bell se diera cuenta, que no habia dormido, la tomo por la cintura y la levanto para recostarla en el suelo.
Cuando hizo este movimiento, el rubio quedo sentado sobre la cadera de la joven, y acercandoze despacio a su rostro, toco con el dedo indice, de su mano derecha, la nariz de la muchacha y dijo

-Es que tu querias el Te de Frutillas...y yo queria complacerte- dijo mientras que en su rostro se formaba una exprecion de niño chiquito regañado.

-Por eso no dormi.....-dijo con la misma exprecion.

-PERO AQUIIIIIII TIENEEEEEEES.......AQUI HAY TE DE FRUTILLASSSS!!!!!!!-grite mientras me acercaba a su cuello y comenzaba a hacerle cosquillas.

La joven comenzaba a sentir algo de culpa por el muchacho, se sentía mal por haberle hecho quedarse despierto por un simple capricho, estaba comenzando a culparse por su estado, reflejandolo en sus ojos escarlata, más allá de las risas que no podía contener al poder percibir las cosquillas que el mago le provocaba.

- Gracias, no debiste molestarte tanto.

Susurra portando una suave sonrisa, mirando al joven con calma y amabilidad, habiéndose ya liberado del muchacho que le provocaba las cosquillas

Cuando la joven se libero, el rubio miro fijamente los ojos de la misma y le dijo:

-Tus caprichos..e intereses...son una obligacion para mi princesa- dijo devolviendo la sonrisa que la joven le entregaba.

-Ademas yo quize buscarlo...no me cuesta nada a mi....- mientras decia estas palabras un frio recorrio toda su espalda, para dar paso a un calor que casi quemaba su cuerpo.

-Bell...yiaghhhhhh-Cuando este quiso decirle a la joven lo que le pasaba, se desvanecio callendo en seco al frio suelo del departamento.

Al principio la pelinegra permaneció en completo shock por unos largos minutos, sin atinar a nada más que recorrer al rubio de pies a cabeza con una mirada cargada de pánico.
Con cuidado, ahora más calma, puso una de sus manos sobre la mejilla derecha del muchacho, comprobando que aun estaba cálido, o sea que seguía con vida, un hondo suspiro de alivio escapó de ella.

- ....

Con detenimiento comenzó a mirarle nuevamente, esperando algún indicio o algo que pudiera explicar todo aquello, con una clara mirada confusa y preocupada en el rostro

Con detenimiento comenzaba a recorrer al joven de pies a cabeza con la mirada, caminando a su alrededor en busca de algo que le indicara la razón de su estado tan repentino...
Cada cierto tiempo chequeaba el pulso del joven, notando que de cierta forma al permanecer de eso modo se encontraba en un estado similar a un sueño largo, con un pulso suave aunque presente afortunadamente.

- ¿Ahora que rayos hago? no se NADA de medicina...

Con cuidado fue recorriendo el lugar en busca de algo que le diera alguna pista o indicación de lo que debía hacer, pensando si alguna vez le había ocurrido esta antes al joven...
Comenzaba a desesperarse, intentando saciar sus nervios mordisqueando insistentemente la uña de su indice con cierta violencia, irritada por su falta de accionar estando en tales situaciones...

La pelinegra joven, harta de su propia impaciencia toma asiento delante del inconsciente rubio, analizando cuidadosamente las situaciones ocurridas hasta el momento. No pudo evitar sentirse algo abochornada ante la conclusión que ahora llenaba su mente, sonando como la más probable y acertada.

- Yo y mi estupida bocota.

Sentenció secamente con evidente molestia, ya que se atribuía completamente la culpa del estado en el que se encontraba actualmente el joven. No podia hacer gran cosa, simplemente dejarle descansar hasta que se repusiera lo suficiente, y verificar debidamente de que no pasara a mayores.

Se sentía algo tonta de no haber pensando con anterioridad en esa posibilidad, mucho más luego de pensar junto a que personas se había relacionado, quienes no era precisamente poseedores de unos hábitos de sueño muy sanos...
Desplegando sus alas negras como la mismísima noche, logró elevar al muchacho lo suficiente como para colocarlo sobre el sillón donde supuestamente dormiría este la noche anterior, yendo también a buscar una cobija y utilizando un almohadón para apoyarle la cabeza.

Por un momento la escena trajo a la desequilibrada mente de la pelinegra la idea de aquel verso antiquisimo que llamaba al ángel de la guarda, pensando en que en ese estado representaría una versión bastante retorcida de lo que seria un ángel de la guarda.
Regresando sus pies al suelo, la ojiroja permaneció sentada a un lado del joven a la espera de su despertar.

Luego de dormir varias horas, el joven rubio comienza a despertar de su largo y confuso sueño.
El ojiazul, abrio lentamente los ojos, para encontrarse con la mirada color sangre de la joven.
Aun con el letargo del sueño, y la confucion de haberse desmayado pregunta.

-Que carajo paso?- con un tono entre enfado y confucion.

-Me duele la cabeza.....mierda- vocifero enfurecido.

Ciertamente no le sorprendía que el joven no pudiese recordar con claridad un momento tan repentino, después de todo incluso a ella, consciente y todo, no podía recordar con completa claridad tan vertiginoso momento.
Antes de colocar algún gesto de desagrado a la situación en general prefirió responder a las palabras del joven ojiazul.

- Te desmayaste, seguramente por agotamiento.

Susurró con cautela, con cierta amabilidad y simpleza, esperando que se le pasase el aturdimiento para poder así comunicarse con él más fácilmente.

- Debiste golpearte bastante duro, lo siento, no reaccione a tiempo... aunque dudo que pudiese sostenerte mucho, si tengo que ser sincera...

El joven no entendia nada de lo que habia pasado...sinceramente en ese momento solo queria saber que hora era.

-Que hora es Bell?- pregunto ahora ya mas lucido.


-Mejor tomemos el te de frutilla......creo que sera lo mejor.- dijo sonriendole dulcemente a la joven.

Comenzo a caminar despacio hasta la cocina y coloco la tetera en el fuego para preparar el te.

Cuando recordo lo que la ojiroja habia echo, corrio rapidamente hasta donde ella se encontraba y la abrazo con mucha fuerza.

-Gracias Bell!!!!!!!- le dijo con mucho enfasis al oido.

-Vamos peleemos un poco hasta que el agua se caliente- dije colocandome en una guardia un tanto chistosa.

mPor un momento la sonrisa que la pelinegra poseia mientras que el joven avanzaba hacia la cocina se esfumo, sucumbiendo ante la sorpresa de ser abrasada tan de imprevisto, aunque regresando a la hora de corresponder ante la muestra de afecto.
Cuando fue liberada, la ojiroja se sorprendió levemente ante la sugerencia de entretensión que le presentaba el muchacho, pero no tardó en acceder ante la idea.

- Ok~, pero no soy buena peleando... creo...

Señala susurrante, aunque nunca en su vida hubiese admitido que eso realmente le ocurría, era muy sincera con el muchacho, cosa que con los demás no sucedía.

El joven sonrio suavemente y apoyando ambas palmas en su rodilla adelantada, y semi flexionada, dijo:

Entonces dame el primer golpe.-dije acomodando mi megilla para que esta golpeara primero como le habia dicho.

Eso si.....no olvides que estamos jugando- dije antes de que ella me diera un golpe de knock out.

-Recuerda que acabo de desmayarme..no es nada agradable...y no me gustaria que volviera a pasar- dije riendome divertidamente.

Vamos bell.....Dame tu mejor Golpe!!!!- levante la voz esperando que esta golpeara.

Tomando una posición defensiva la pelinegra oyó atentamente las palabras y recomendaciones del joven. Ella no se destacaba precisamente en la pelea de cuerpo a cuerpo, aunque si era bastante eficiente defendiéndose.
Con una media sonrisa ya forma en sus labios la ojiroja alcanzó un golpe hacia la mejilla que el joven le exponía, suficiente como para que lo sintiera levemente pero no para lastimarle.

- Vaya forma de jugar, te pareces mucho a mi hermano con sus juegos.

El ojiazul sintio el golpe que la muchacha habia asestado. Y riendose dijo:

-Tienes una buena postura, y golpeas bien....pero...-dijo haciendo una pequeña pausa entre fraces.

-Puedes hacerlo en el suelo?- Una vez que pregunto esto, el joven tomo ambas piernas de bell y levantandola en el aire la acosto en el suelo.

Acomodandose entre las piernas de la joven, y abriendose paso por su guardia comenzo a pellizcar sus megillas.

-Vamos bell.....Que paso?....no puedes golpearme?- mientras pellizcaba sus megillas, comenzaba a morder suavemente su estomago a modo de juego y diversion.

-Vamos bellllll......se que puedes hacerlo mejor- dije mientras seguia dando suaves mordidas a su estomago para que ella se enojara y me golpeara con ganas.

Tenia que admitir que esa situación comenzaba a molestarla un poco, aunque mantenía presente la advertencia que el joven había dado, no pretendía lastimarle, aunque dudaba que pudiese hacerlo ciertamente.

- ... No creo que pueda seguir cumpliendo con las reglas si sigues haciendo eso...

Murmura suavemente, aun con su media sonrisa pintada en los labios. Concentró entonces su vista en alguna forma para hacer que se fuera de encima de ella, pero sin herirle realmente.
Al comprobar que su posición era buena para la medida que pensaba adoptar, eleva el pie derecho hasta posarlo sobre su pecho, sabiendo que no le lastimaría, pateando firmemente para quitárselo pero nuevamente sin lastimarle, aunque esta vez si sentiría bastante el impacto.

Cuando senti el fuerte golpe en el pecho, todo mi cuerpo retumbo haciendo que un leve quejido, seguido de una leve risita.

-THIS LIKE ME!!!-grite mientras pasaba, suavemente, la mano por donde el pie de bell habia impactado


RAIIIIIIIIII-PUUUUUUUUUUU-KEEEEEEEEEENNNNNNNN!!!-cuando iba a lanzar el rayo al suelo para que esta joven lo cintiera......escuche que la tetera comenzaba a sonar.

Por lo que rapidamente cancele el movimiento y corri hacia donde estaba la misma.

La ojiroja, completamente descolocada por el cambio de movimientos permaneció momentáneamente estática en su sitio, siguiendo poco después a su rubio anfitrión por el pasillo persiguiendo el silbido del agua herviente.

- Ya hirvió

Mencionó puntualizando indudablemente lo obvio, como si de un niño pequeño, perdido y desconcertado, se tratase.
Con su indice en alto señalaba la tetera, con sus ojos carmín enfrascados en la misma estructura de fina cerámica.
Era usual en ella vivir esos esporádicos letargos, como si el tiempo quedase congelado en una instancia y le tardase un tiempo amoldarse a un nuevo emprendimento... esto solo dejaba a relucir que la mente de la pelinegra no estaba precisamente en ese sitio actualmente