ABURRIENDOME!

- Bajar el tono de voz - -'., -
Contestó, mirandola de mala gana ya que aquél grito que dió la joven le había despertado de un preciosísimo sueño. Bostezó i se sentó a su lado, mirandola muy detalladamente, abriendo bien sus párpados y dejándo notarse sus lindos iris de color negro.,
- Hmm.. -

Se quedó callada por unos segundos, asimilando situaciones, recordando momentos vividos... No recordaba el rostro de ésta muchacha, no la recordaba... Pensó, tal vez que ésta jóven le seguía por haber hurtado de aquella casa con rejas color bordó, una tarta de manzana. Pero no fue su culpa, no lo fue, era tan sólo porque había apostado con unos amigos que la quitaría de aquella ventana y se la aventaría a un señor ya mayor, quien moriría por aquél pastelazo...
¡NO!
Exclamó, pensando que Leila era la reencarnación de aquél señor, quizá si hablaba bien con él, lo solucionaría todo...
¡Era el tiempo en que murieras! ¡Eras tan viejo e inútil!
Gritó, aún a su lado, muy cerquita. Delilah confundía situaciones a causa de su locura., estaba tan sola y aislada de todos hacía ya tanto tiempo que habría perdido un tornillo.. (xD)

(XDDD)
La joven abrio los ojos sorprendida ante lo que dijo, simplemente haciendose un poco hacia atras, con una gotita en la sien.
- emmm creo que me confundes -.
dijo finalmente, para luego entrecerrar los ojos ante lo que dijo "viejo e inutil"? que se creia para decirle asi, y para confundir su genero
- Delilah! soy yo! Leila! hermana del inutil de Iori! -.dijo cruzandose de brazos, mirando a esta fijamente.

- Oh, lo siento... -
Suspiró aliviada, si se había encontrado verdaderamente con aquél viejo no iba a dudar en golpearle y acabar con su vida, simplemente para ver si en otra ocasión se encontraba con él. ¿Leila? ¿Y por qué no la recordaba? Será... ¿Será que la locura se adueñó de su mente, revisó sus cajones más ocultos y destruyó todo? Entonces, ¿Por qué habría de recordar algo? Estaba allí y tampoco recordaba qué hacía, pero su espíritu, cuerpo y mente estaban allí. Se quedó en silencio, pensando, tal vez buscándo algún recuerdo... Cuando finalmente casi recordaba algo, una señorita apareció. Le habría hablado a Leila primero, pero luego se dirijió a ella. Aquella muchacha, era preciosamente molesta, ¡Qué le habría de molestar que anduviesen gritando, si no se trataba de ella...! Pero., "Es verdad...", pensó Delilah, "¿Qué derecho tenemos, nosotras las princesas, para andar gritando en las calles?". Luego sonrió y soltó una risa leve, que se esfumaría con la voz de ella.
- Y, ¿Quién eres tú?... ¿Qué haces entrometiendote en la conversación de los demás? -
Dicho esto, sonrió. No pretendía ser asquerosamente vulgar, pero quería ver cuál era la respuesta de la chica que recién había aparecido, pues si era la respuesta que ella esperaba, le daría un enorme beso en los labios, así como lo hacía con cada quien que le agradaba.

La joven se mantenia en silencio, mirando a ambas jovenes, esperando por alguna buena reaccion, ella ya conocia al menos a una de ellas, pero la otra era casi un misterio, quizas porque ap esar de todo no era muy sociable y con el unico que hablaba - y muy apenas hablaba - era su hermano, pero al parecer ambas eran sus sobrinas.
"pff que wilo" penso, las chicas eran hijas del mismo rey, pero del mismo padre?

Comenzó a reir fuertemente, pues Scarlet tenía razón y eso la puso felíz... La miraba con tal intensidad que sus ojos podrían fundir a aquella mujer tan bella y hacerle parte de su alma. Se levantó del asiento, dejándo una sombra que no encajaba con ella en el suelo, y dirijió su mirada a los ojos de Scarlet, dispuesta a besarle en los labios. Al escuchar cuando ésta le llamó "hermana", no pudo evitar que sus globos oculares casi se salgan de sus párpados... ¿Qué estaba diciendo? ¿Era verdad, esto que decía Scarlet? ... Su hermana... Aquella con la que compartía lindas y escandalosas travesuras... Ahora ella estaría más alta y más bella que en ese entonces, pero tenía la misma mirada de siempre.
- Mi nombre es Delilah. -
Contestó, aunque se sentía sorprendida y algo alegre de encontrarle denuevo, actuó como si no le hubiese escuchado lo último, intentó ocultar la cara de sorpresa con el beso, se acercó a Scarlet y tomó su rostro con ambas manos, la miró fijamente y, notando que no se opuso, acercó su carita pálida a la de ella, uniéndo sus labios con cariño y en forma de respeto.

[Perdonad Leila si no te he agregado al post, pues no encontré manera de hacerlo. A menos que queraís un trío *Q*! ~ x/D]

Scarlet seguía siendo la misma de siempre, Delilah lo pudo ver através de sus ojos. Al notar la mano de su hermana en su rostro frío y pálido, sonrió de medio labio, mirándole a los ojos muy intensamente cuando se estaban besando. Mantuvo la cercanía a ella aún cuando sus labios se separaron, y rió por el comentario de Scarlet hacia Leila.
- Se ve que no soy la única con mala memoria. Heh ~ -
Luego de decir esto, inhaló un poco de aire, finjiendo que lo podía soportar en sus pulmones podridos, y se dirijió lentamente hacia el banco donde estaba sentada antes, al lado de Leila... Su tía. Se quedó callada y comenzó a mirar sus manos, sus uñas, los anillos...